Bretaña
Tras un viaje de algo más de una hora, el avión llegó al aeropuerto Charles de Gaulle de Paris. La avalancha de vuelos que llegaba esa tarde del 31 de diciembre pasó un relajado control fronterizo… esta vez no timbraron mi pasaporte, creo que hasta podría haber estado vencido y habría vuelto a Francia sin problemas.
Tras 2 horas de viaje en trenes y metros, pude llegar a la Gare de Montparnasse y tomar el tren que me conduciría a Quimper, ciudad ubicada al extremo noroeste de Francia, en la región de la Bretaña. Luego a esperar una hora… y viajar casi 4 más, en las cuales creo haber conciliado algunos minutos de sueño, llegué a la estación de la citada ciudad, donde me esperaba Paula, una chilena amiga de mi amiga Sandra.
Un abrazo de chilenos… de esos que no se ven por acá, y a viajar una hora más en auto para llegar a su casa en Plouhinec, para darme una rápida ducha y partir a la despedida del año viejo.
Pasadas las 23 horas llegamos a casa de Natalie y Joel, un muy agradable matrimonio de bretones que tenían su casa llena de invitados para el carrete. Fui presentado uno a uno, comimos un rico pescado (Joel es pescador) y tomamos mucho vino. Se me acercó a conversar una azafata muy simpática que hablaba como cinco idiomas, castellano incluido.
¡Las 12! Bonne Année! Bonne Année! …¿Y los abrazos?... No hay no ma’. Un apretón de manos y dos besos. El entusiasmo no para, y empezamos a bailar. Comenzaron los ritmos que se danzan “como quieras”… y al rato suenan los merengues y las salsas… y si yo pensaba que soy tieso para estos menesteres, los franceses parecían una familia de Robocop, jajajaja. Entonces, los chilenos se separan en las danzas, y al rato cada quien estaba dando clases de salsa. Dicen que en el país de los ciegos, el tuerto es el rey, jejeje.
El asunto empieza a degenerar… y lo que partió como salsa se transforma en un baile bretón, donde todos formábamos una ronda tomados de los dedos meñiques, mientras alguien pasaba al centro y elegía a un compañero de baile, con quien debía darse un par de besitos en las mejillas, y cambiar de pareja… entretenido el asunto.
Por ahí andan los hijos de Paula, que hablan francés y castellano con una fluidez envidiable. También bailo con ellos y nos matamos de la risa… sigue el carrete hasta que el cansancio del viaje me obligó a sentarme largos minutos en un cómodo sofá… y alrededor de las 5 estábamos volviendo a casa de Paula.
El 1 de enero fue un día vegetativo, la caña no dejaba levantar el cuerpo, y a lo más debo haber visto un rato de tele con los niños.
El segundo día, ya todos más repuestos, Paula llama a una amiga para que saque a pasear, porque ella no podía salir a causa de su niña más pequeña. Al rato llega Laura, una española muy simpática, que en dos jornadas me llevaría a conocer los alrededores, contándome las historias respectivas como buena guía turística.
Así, aquí podemos ver algunos menires de Plouhinec, tumbas mortuorias del paleolítico, y que abundan en esta región de Francia:
Un poco más allá se ve el pueblo y la larga costa, que me recuerda el litoral del sur de Chile.
Seguimos por Plouhinec, y luego hacia Audiarne, y veo las construcciones tradicionales de piedras, y la mezcla de símbolos cristianos y celtas. El culto a Jesús de Nazareth, al sol y a la fecundidad de la madre tierra. Algún parecido con América es mera coincidencia. Nótese el techo de paja en la foto panorámica.
Algunas cosas a notar en las fotos:
- Construcciones con pisos que crecen hacia la calle, porque cuando se hicieron, el impuesto era por uso del suelo, y así ganaban espacio sin pagar por ello.
- Cerámica bretona tradicional. Linda, pero carísima.
- Una tradición popular es que cuando nace un bebé, se le regala un plato o tazón con su nombre… lo que también puede ser un buen souvenir. No pude encontrar RODRIGO, pero sí otros nombres…
- La bandera del graffiti (también en portada de este artículo), es la bandera bretona.
Cuando en la segunda jornada ya casi era de noche, llegamos a esta ciudad donde se ha rodado más de alguna película ambientada siglos atrás.
Para mi cuarto y último día en la región, Paula pudo dejar a su hija menor en una guardería, y junto a ella, los dos niños y Natalie (la anfitriona de año nuevo). Fuimos a recorrer la costa cercana, viendo a lo lejos como Joel trabajaba en la pesca del róbalo. Luego fuimos a buscarlo al puerto de Douarnenez.
Acompañé a Joel a guardar el pescado al frigorífico, observé el proceso y como etiquetan los pescados con la identificación de cada pescador, una especie de certificación de calidad por haber sido capturado de manera artesanal.
Finalmente nos juntamos con los demás, compartimos otro rato en una grata conversación donde me burlaba de Paula porque le gustan los Quincheros (vaya forma de explicar esto en francés, jeje).
Et voilà… mi breve paso por la Bretaña. Al otro día mi tren salía a las 7:20 desde Quimper rumbo a Bordeaux; a madrugar nuevamente.
********************CRÉDITOS_(y_agradecimientos):
Producción en Chile: Sandra Leyton
Producción en Francia: Paula Campos, Laura Delgado, Natalie, Joel
Fotografía y Guión: Rodrigo… un chileno en Francia.
4 comentarios:
Excelente nivel de fotos como de coostumbre, las de la ciudad medieval me parecieron particularmente buenas. Como se valora el patrimonio en algunas partes del mundo, que edificios mas bonitos, ¿Serán góticos?.
Buenas tardes,
Soy de Plouhinec y adorei su manera de hablar de mi pequena aldeia. Nuestro "Pen ar Bed" (fin de la tierra en nuestro idioma el breton) es una region dificil economicamente mas para quien toma el tiempo de amarnos el pueblo breton puede acoger a los estrangeros de una manera maravillosa. Es verdad que como todos los europeanos tenemos dificuldad para bailar sin vergona la salsa cubana o el tango argentino, o el samba brasileno... Como todos los pueblos de origen celta, tenemos danças de grupo que facilitan también el contacto humano y un relacionamento simpatico para aprender los pasos. Gracias por su descripçion de Plouhinec. Todos los Chilenos son los bienvenidos en nuestra region. Espero que mi castellano no sea demasiado "portunol" e que todos ustedes puedan entender...
En Chile conozco la region norte con el desierto de Atacama, e también la ciudad de Santiago. Infelizmente no tive tiempo para visitar el sul.
Con amizade ultramarina.
KENAVO !
Laurence
Sorry, I can't speak spanish.
Very beautiful pictures ! Very interesting website.
In fact, I live in Brittany and I'd like to answer to the post just above just to tell that I think she's wrong. This is old myths to think Brittany is a very difficult economic region. Few people knows this is the place in France where unemployment rate is the lower of the country (7 % against 9 % average in France). The economic GDP growth is the higher since the 60's. And average income about the 5th of the 22 french regions.
Old myths, I said...
But newermind. It was just a little precision and I guess most of people won't care about statistics. Nice pictures and living experience are much more interesting than those short facts. Sorry for that... :-)
Bonsoir,
Réponse au Papillon : j'ai été maladroite dans mes explications je parlais du Cap Sizun (pour les difficultés économiques). C'est une petite région où c'est vraiment galère de trouver un travail... Et je sais de quoi je parle... Cela fait des années que j'essaie de revenir en vain. Seules manières très faciles de revenir être aide-ménagère, ou travailler dans une maison de retraite... au service d'une population vieillissante (mais ce n'est pas ma spécialité)... En plus ils veulent faire un Parc National qui entravera énormément toute activité économique... Là on pourra vraiment parler de réserve d'indiens... Désolée de ne pas avoir été claire. Mes propos ne concernaient que le Cap Sizun...
Esta respuesta concierne el mensaje de "Ar Valafen" (mariposa en breton). Yo respondi que quando hablaba de problemas economicos yo hablaba unicamente del CABO SIZUN, que es una pequena region situada en la parte occidental de Bretana (Pont-Croix, Audierne, Plouhinec, Plogoff). Tenemos en Cabo Sizun verdaderos problemas para encontrar un trabajo...
Kenavo !
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